No quiero ser amigo de tu empresa en Facebook

Nueva York, julio 2010

La reflexión que les voy a hacer hoy no está directamente relacionado con viajar aunque en parte está relacionada con el turismo.

Muchas empresas grandes y pequeñas intentan hacer un hueco en el mundo del social media por todos los canales 2.0 (Facebook, Twitter, Flickr, etc…) desde las grandes corporaciones como Vodafone hasta el garito donde sueles ir los sábados por las noches.

Pero en este caso quiero hablar de Facebook; hace un tiempo cuando no existían páginas para empresas o fan pages era «comprensible» que las empresas crearán cuentas personales en Facebook con el nombre de su establecimiento ya que no existía otra forma.

Nueva York, julio 2010

En mi lista de solicitud de amistades tengo al casco histórico de Santa Cruz de La Palma, pero yo me pregunto: ¿cómo voy a ser amigo de la calle real y de sus adoquines? ¿acaso me puedo ir a tomar un café con el casco histórico?

No puedo ser amigo de una empresa en mundo real y se supone que la web 2.0 es una representación de la realidad en internet por lo menos desde mi punto de vista.

Para crear una página en Facebook simplemente hay que hacer click aquí, una vez está creada hay que realizar un trabajo de estrategia y creación de contenido que pueden hacer que la presencia en la red social reporte beneficio o que simplemente sea un «florero».

Resulta que un amigo mío empresario hace unos meses cuando le comentaba este asunto me decía que a él gustaba estar en contacto con sus clientes por el chat de Facebook.

Hotel Rural Victoria en Facebook

Así que supongamos que el hotel Paco (nombre ficticio) quiere estar metido en Facebook. Lo primero que debería hacer es tener una persona encargada de estos asuntos y en el caso de querer tener un perfil personal para llevar la cuenta no debería llamarse como el hotel sino que por ejemplo se podría crear «Recepcionista del hotel Paco» y especificar dentro del perfil la persona que lo lleva.

Aunque en mi opinión la opción más razonable sería añadir un cliente de chat para poder hablar con los clientes dentro de la fanpage del hotel.

Pero vamos a ponernos en el caso del pequeño empresario digamos por ejemplo un bar o un restaurante pongamos por ejemplo «el típico» que es un lugar de hamburguesas en Santa Cruz de La Palma.

En lugar de crear una cuenta personal de Facebook «Hamburguesería el típico» porque no crearla usando la identidad de la persona que hace las hamburguesas «Pepe el del típico», vale que es un negocio pequeño pero estoy seguro que si tuviera una fan page triunfaría (yo me hacía fan/liker seguro).

Pero, ¿qué pasa si la empresa ya tiene un perfil con un montón de clientes y queremos pasar a una fanpage? la solución es sencilla:

lo primero es crear una nueva cuenta de Facebook como por ejemplo «el recepcionista del hotel Paco» para crear la nueva fanpage, lo segundo es avisar a los amigos/clientes del cambio que se va a realizar en Facebook invitándolos a pasar a la página como está haciendo ahora mismo la cerveza Dorada de Tenerife.

Una vez está hecha la migración (que lleva su tiempo) se debe borrar el perfil personal, pero OJO hay que recordar que la página debe ser creada desde otro perfil distinto porque sino será un suicidio 2.0 en toda regla.

Aunque la razón por la que estoy en contra de que las empresas tengan perfiles personales es que va en contra de mi privacidad personal, ya que cuando la persona que lleva la cuenta corporativo tiene acceso a todos mis datos (mi muro, mis fotos y toda mi información personal) cosa que no me hace mucha gracia por cierto.

Sin embargo las estadísticas de las fan pages ofrecen gran cantidad de información (edad, localización, sexo, idioma principal) todo bien ordenado y con unos gráficos que pueden quedar geniales en una presentación.

Este es el motivo por el que animo a las empresas a dar el salto a la página para dejar de tomarse las redes sociales como una moda pasajera y darse cuenta de la importancia que pueden tener en cualquier sector empresarial pero en especial en el turismo y en el ocio.

Por último os voy a presentar a dos personas que han sabido usar el Social Media para dar a promocionar sus empresas que son ejemplos a seguir:

Pepper SantBlai: Marta Bonet puso de relaciones publicas de su establecimiento de agroturismo a la burra Pepper y se ha convertido en la embajadora de la «otra Mallorca», alejada de los alemanes que van a la isla a ponerse tibios a cerveza y en algunos casos a lanzarse de balcones y fue seleccionada en el top 10 del  Daily Telegraph de los twiteros junto con Ashton Kutchen o Stephen Fry.

Bere Casillas: Bere es un sastre granadino que comenzó a entrar con sus clientes por Tuenti para que los clientes etiquetarán sus trajes para tener un «catalogo de gente de verdad», después se metió con Youtube y su vídeo de como hacer el nudo de corbata Windsor lleva 722,000 visitas (yo confieso que usé el vídeo en nochevieja para atarme la corbata) y tanto ha sido lo que la armado el mundo 2.0 creando marca de una pequeña sastrería de Granada que acabó siendo entrevistado en Buenafuente.